Teresa Fernández de 43 años, oriunda de Los Amores, tuvo que huir de su localidad junto a sus hijos por la
constante violencia de género que vivía en su hogar.
Ahora
Teresa
vive en la ciudad de Vera, junto a su madre, en una casa muy precaria con
necesidades básicas insatisfechas y con el miedo de que su marido viole la
restricción de 200 mts. que la justicia dictaminó para quitarle a sus hijos.
Teresa decía en la televisión
verense: “Estaba muy preocupada, necesitaba salir de mi casa porque estaba mal
con mis hijos por culpa de la violencia de genero.
Estuve 21 años con mi esposo, últimamente vivía con miedo porque
me agredía verbalmente frente a mis hijos.
Me dijo que iba a venir a sacarme a los chicos, y yo no quiero
eso, prefiero morirme a que me los saque.
Acá estoy viviendo muy precariamente, no quiero volverme a
buscar mis cosas porque tengo miedo de lo que me pueda hacer.
Ya hice la
denuncia y la justicia dictaminó una restricción domiciliaria de 200 mts. Los vecinos de Los Amores tienen miedo porque saben que es
violento, yo le pedí ayuda a uno de ellos y no me pudo ayudar por eso”.
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