Fabián Iza es el chofer del Unimog del 107 que fue noticia este fin de semana
cuando debió asistir un parto en pleno trayecto,
cuando traía una embarazada desde Los Tábanos y rompió bolsa unos 3 km antes de
llegar a Intiyaco.
Además de otro paciente venía la mamá de la
parturienta, pero fue él quien debió hacerse cargo de la situación que
afortunadamente tuvo un final feliz.
“No es la primera vez que nos toca a los
conductores asumir esta responsabilidad de atender un parto, solo que éste, por
la situación actual y las redes sociales, se magnificó mucho”, expresa con
cierta humildad.
Hace 7 meses que Golondrina no tiene médico y
eso dificulta enormemente la atención de la salud, porque cualquier dificultad
debe ser atendida en una escala que comienza en Intiyaco y puede terminar en
Vera o Reconquista.
Al relatar el “protocolo” que sus
conocimientos y la práctica lo llevaron a cumplir describe que lo primero fue
tranquilizar a la joven madre y esperar el bebé que llegó al mundo sin mayores
dificultades, pero “como no había hilo ni elemento alguno, tuve que romper una
sábana para atar el cordón; cuando llegamos al asfalto el Dr. Roda esperaba con
la ambulancia y terminó la tarea”.
La bebé pesó 3,200 kgrs. y ya fueron dadas de
alta para retornar a Los Tábanos, en el mismo unimog.
Cosas de este norte que cuando más anuncios se hacen la gente más extraña el tren que cumplía una función social que hoy se valora más que nunca.
letyana Press
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